Soberbia, la historia de un amor sin ataduras

Soberbia es el primero de los pecados capitales y así precisamente se titula el primer single del disco Pecado Original, la nueva entrega musical de Patry White. El tema viene acompañado de un video que recrea una historia de amor y lujuria, ambientada en la época victoriana.

La soberbia, a veces llamada vanidad, orgullo o arrogancia, se considera el pecado fundamental y es la madre de todos los vicios. El amor es también un vicio que no se debe limitar, y sobre esa línea se mueve la narrativa del audiovisual que se desarrolla entre situaciones donde el sentimiento fluye en su estado natural, sin presiones, y guiado por el deseo en su capacidad plena de romper ataduras.

Patry White siempre crea sus conceptos y esta vez escogió para dirigir su obra de arte a Danilo C. Paris, joven realizador graduado de la Facultad de las Artes de los Medios de Comunicación Audiovisual (FAMCA).

El clip se desarrolló con la participación de un elenco actoral de primera línea, encabezado por Jorge Treto y contó con Juan Carlos Tavío y David Cruz como directores de arte y fotografía, respectivamente.

La canción que acompaña este pecado supone una apuesta novedosa. La artista propone un sonido que coquetea con el pop / rock acompañado por la guitarra de Dagoberto Pedraja, en toda su dimensión.

Soberbia es también la manera en que Patry White ilustra la expansión que atraviesa su proceso creativo, donde tiene la meta de mezclar otros géneros, no solo desde lo estrictamente musical, sino abarcando el arte en su máxima expresión.

La cantante busca una sonoridad que se acerque al cine, que pondere la calidad de cada obra y en la que sean evidentes los retos que entraña para todos los que se encargan de darle vida. “Esta será la nueva imagen de la pionera del género urbano en la Isla, ahora más cerca de un sonido interesante mezclado con el cine”– reconoció la cantante que también asume un rol protagónico dentro del audiovisual.

Soberbia es el primer sencillo del disco que incluye otros seis temas denominados Avaricia, Lujuria, Ira, Gula, Envidia y Pereza, así como las siete pasiones del alma que la iglesia fijó como pecados capitales.